La era Caruso

            Un día como hoy pero tres años atrás (28 de febrero de 2009) Ricardo Caruso Lombardi se hacía cargo de la dirección técnica de Racing Club. Luego de que la institución dulce de Avellaneda finalizara un 2008 turbulento, jugando la promoción a mitad de ese año, comenzaba el 2009 con la difícil tarea de evitar esa instancia nuevamente.

Si bien se había perdido a la figura del equipo, Maximiliano Moralez, el club tuvo incorporaciones importantes en ese momento, como lo fueron Rubén Ramírez y Lucas Castromán. Mantuvo a su técnico, quien lo había salvado del descenso en 2008, Juan Manuel Llop pero no iba ser el “Chocho” el héroe racinguista de 2009.

Comenzó el Clausura ’09 perdiendo las primeras tres fechas (vs. Lanús 1-3; vs. Huracán 1-4; vs. Independiente 0-2) y Llop tuvo que dejar su cargo. Racing, complicadísimo con el promedio, veía la promoción como una posibilidad dúctil para evitar la pérdida de la categoría. Pensamiento que fue desterrado de las mentes académicas en el corto plazo ya que su nuevo técnico, Ricardo Caruso Lombardi, dio un giro de 180º (grados) a un equipo que parecía no tener alma.

No tuvo su mejor comienzo: empate 1-1 con Argentinos de local, sobre la hora y derrota en Victoria ante Tige por 1-4. Pero desde la 6º jornada ante Godoy Cruz, partido que lograría ganar por 1-0, todo cambiaría en el futuro de Racing. Desde la fecha en que se hizo cargo del equipo sacó la misma cantidad de puntos que el campeón de ese torneo (Vélez) obteniendo 30 puntos en 16 partidos disputados, finalizando su equipo en el 5° lugar.

            Un equipo que despertó pasión y adrenalina en sus hinchas como hacía tiempo no vivían y odio en aquellos que les era tan difícil enfrentarlo y no podían entender como un equipo que en tres fechas disputadas tenía prácticamente su futuro definido en la promoción o, peor aún, en descenso directo. El helicóptero de Néstor Kirchner y los regalos a los jugadores en los entrenamientos por los objetivos conseguidos partido a partido, fueron el color de un campañón a cargo del “Tano”, Ricardo Caruso...

Por Franco Fernández.